Sobre el poliamor y mi propia vida – Reflexión
Hoy me voy a descargar un poquito hablando sobre el poliamor.
Acabo de tener de nuevo la oportunidad de contemplar que la clase de vida sentimental y sexual que llevo dentro y por la que yo abogo es factible. Y no sólo eso, sino que se puede llevar bien y ser feliz con ella.
He podido darme cuenta de esto al conocer más sobre la relación que mantiene Johnny Soporno (una persona a la que admiro por su sentido de la honestidad y la integridad, a quien habéis podido leer en este blog cuando traduje su artículo sobre el verdadero juego interno) con la que llama su «novia primaria», Violet Marcell.
Ambos relatan su perspectiva al respecto de la relación, y es tan pero tan sencilla y auténtica que no quepo en mí de gozo al darme cuenta de la razón que tenía al defender esta clase de pensamiento… Y haber descubierto una nueva (y parece que mejor) manera para llevarlo. Además, me alegro muchísimo porque ellos han encontrado a la persona adecuada para tener esa clase de relación.
Básicamente, y tal como lo explican ambos, se limitan a aceptar que están enamorados el uno del otro (en el sentido clásico, añade Johnny) y lo viven al máximo. Eso no quita que practiquen el poliamor, por supuesto.
Aparte de esto, Violet añade que Johnny es también su mejor amigo además de su amante.
Ella explica que ninguno de los dos siente celos del otro, ni la necesidad de competir, inhibirse o cohibir/coartar de ninguna manera al otro.
Mejor todavía. En vez de poner su esfuerzo en eso…
Se animan el uno al otro a ser tan felices como puedan ser.
Ambos cuentan que saben (y Violet es más explícita al respecto en su vídeo que Johnny en su post) que a veces esa felicidad vendrá del hecho de experimentar otras cosas y tener otros compañeros de juegos; y se lo permiten bajo la regla del «play safe» (es decir, cuida de tu salud y sé responsable).
Johnny afirma que lo que permite que esto funcione es que una única mujer es la que porta el título de novia y el derecho a llamarle su novio; y el resto pueden asumir el rol de novias y actuar como si él fuera su novio… Pero que la relación con sus novias secundarias no es la predominante.
Johnny entonces asumió dos reglas:
- Nunca ser el único amante masculino de ninguna mujer.
- Todas sus novias DEBEN COMPROMETERSE a hacer lo posible para llevarse bien con el resto.
Y explica al respecto que se asegura de que tengan claras las cosas que pueden suceder.
Resulta que el poliamor también tiene sus reglas…
De hecho me gustaría transmitir sus palabras, y lo haré así:
«Al respecto de la primera regla:
Toda mujer con la que estoy sabe INMEDIATAMENTE (porque se lo digo directamente) que si no estoy con ella es probable que esté con otra mujer.
Por tanto, necesito que ella comprenda, aprecie y acepte que ELLA NO ESTARÁ JAMÁS ligada a un acceso ilimitado, sin restricciones y exclusivo a mí. Y como tal, deberá encontrar formas de divertirse por sí misma cuando no estamos juntos.
Ninguna cantidad de Pero cielo, ¡yo sólo quiero estar contigo! hará que pierda mis papeles y cambie de idea. Y de hecho, esa es solamente una autopista de fuego directa al infierno… Cuando su resentimiento comienza a acumularse y ella se convierte en un demonio de ojos verdes.
Por tanto, insistiendo en que tenga otros compañeros masculinos, elimino A) su justificación para sentirse tensa conmigo cuando no puedo estar para saciar sus apetitos, y B) la posibilidad de que nos estanquemos ya que me aseguro de que ella refine constantemente sus expectativas y sus habilidades, y por ello, yo mismo me tengo que mantener a la par y eso elimina mi complacencia.»
¿Quién lo diría? ¡El poliamor no te deja dormirte en los laureles!
Por supuesto, no es tampoco un camino de rosas. Veamos cómo lo explica Johnny:
«Al respecto de la segunda regla:
Dado que ellas saben que yo tengo mis cosas, igual que ellas mismas las tienen, y saben que hay otras; comienzan a darse cuenta de que no hay cabida para la rivalidad.
De que las peleas de gatas, o hacer un vacío colectivo, o aliarse en contra de otras chicas en el círculo no va a servir de nada…
De que, de hecho, si eso sucede, las implicadas deban abandonar la que actuando de otra forma sería una situación muy agradable.
Esta segunda regla garantiza un estilo de vida fundamentalmente armonioso que propicia la felicidad, y me ha servido durante la mayor parte de una década sin mostrar signos de freno ni desgaste. «
Esta es la postura de Johnny en cuanto al poliamor
Una vez transmitidas sus dos reglas, os dejo con Violet para cerrar el artículo:
Cualquier curiosidad al respecto de cómo cambia Johnny de relación primaria; o sobre si es algo que suena muy bonito sobre el papel pero no es tan fácil en la realidad… Podéis saciarla si entráis en el vídeo desde la página de YouTube y clicáis en el enlace de la descripción.
Allí podréis leer en Facebook el texto original de Johnny y los adendums al mismo.
Finalmente, me gustaría conocer vuestras impresiones y experiencias al respecto.
- ¿Qué clase de vida lleváis en cuanto a relaciones? ¿Tenéis una relación ahora mismo (abierta, cerrada, o lo que sea)?
- ¿Se ajusta a vuestros deseos reales y vuestra forma de ser, o está condicionada por las convenciones socioculturales?
- ¿Hay entendimiento y aceptación incondicional de la forma de ser y la libertad de cada uno? ¿Tenéis confianza suficiente en el otro para ver a más personas?
Os espero abajo en los comentarios, si deseáis acompañarme.
Y con este terminas tu trilogía de la friendzone xD. Bueno, digamos que estamos en el 2.5, le falta para terminarse, a menos que quieras una tetralogía… Interesante este Soporno, y más su novia. Además, creo que ese pensamiento es el que subyace de toda la filosofía de los Amorati; que al fina todos nos podamos divertir, disfrutar y ser felices.
Por cierto, tiene unos videos donde sale con nuestro amigo Zan, ya veremos que dicen entre ellos. A parte, el tipo tiene humor, y creo que es por eso que tiene las mujeres que tiene: hacer reír a una mujer es de lo más fundamental -y entretenido- para mantener este tipo de relaciones.
Bueno, ya veremos si este tema sigue floreciendo… Aunque lo más seguro es que sí, porque tiene tal vez demasiada relación conmigo como para obviarlo, pero no tanta como para pasarme el día con el asunto entre manos. Una ex pareja mía solía decir que el buen humor hace el mejor amor, y sigo pensando que tiene razón.
Buena filosofía. Si algunas cosas evolucionan, por qué no las relaciones?
Es cierto lo que mencionas al final, puede sonar muy bien en papel. Aunque creo estamos tan acostumbrados a la monogamia que nos parece poco probable que veamos otro tipo de relación y por eso pensamos eso acera de la poliamoría. No se, yo he estado tanto tiempo sin definir las relaciones que tengo con algunas chicas que estoy abierto a las posibilidades, pero algo claro aquí es que tenemos que definir que es lo que queremos y dedicar todo nuestro tiempo a hacerlo realidad, con los pies sobre la tierra. Lo mas probable es que muchos no les parezca viable este tipo de relaciones., y eso es bueno. 🙂
Más que interesante… Como un modo de vida alternativo. Aunque en este momento la «poliamoría» no me atraiga los argumentos son bastante buenos =)
Bueno, bueno en temas de relaciones nada está escrito, cada quien puede construir lo que mejor le viene a cuento, pero siempre desde la honestidad me parece a mí.
Sin embargo, para llegar a este tipo de relaciones hay que conocerse mucho a uno mismo, porque aceptar compartir a la persona que amas con otra u otras no es a lo que estamos acostumbradas y por eso puede chocar un poco el concepto.
Pero hay relaciones poliamorosas donde el sexo no es necesario y no es lo único que buscas. Lo que necesitas muchas veces es un tipo de conexión diferente, algo que tu pareja actual no te da o no puede darte porque sencillamente no es su estilo.
Yo actualmente tengo una relación basada en la comunicación, no es abierta, ni es cerrada. La construimos cada día, cada momento que compartimos. Sin embargo si hay que etiquetarla diré que es una relación basada en la monogamia, aunque no descarto nada porque la vida da muchas vueltas, tampoco ando esperando o buscando otra persona para incluir en mi relación actual. Creo que estas experiencias, para una persona que nunca ha vivido este estilo de relaciones, no se buscan, a veces simplemente llegan a tu vida y cuando llegan es cuando hay que evaluar si vale o no la pena vivir una experiencia de estas o seguir como estás.
Te voy a colgar de ejemplo en mi pared… Este comentario tiene esencia y es todo lo que puedo decir al respecto.