Andaba yo de pesquisa nocturna en Facebook como excusa para coger sueño y hacerle sangre al colchón, cuando ví algo que me encendió la sangre.
Para que veas, no era una cosa tan rara. Era una muchacha diciendo, tan alegre y vivaracha ella, que quiere estar soltera pero conmigo.
Y no me lo decía a mí explícitamente, que ya habría sido motivo sobrado para mi descontento y mordaz reacción; sino que era un texto –de esos cuquis de miles de likes y shares, ¡oigh!– en el que básicamente se te anima a que vayas a tu puta bola, claro, pero oxe, que de vez en cuando eches cuenta de alguien que, a su vez, de vez en cuando te querrá echar cuenta a ti. Porque se conoce que le agobia menos y que es más moderno, eso. [Leer más…] acerca de Como quieras, mientras no me jodas