Brújula para principiantes en Online Dating

¿Nuevo en la ciudad? ¿Deseas cambiar de aires? ¿Buscas ampliar círculos? ¿Acabas de volver del extranjero? ¿Andas a la caza de aventuras elegantes? Es casi seguro que acabarás recurriendo al online dating.

Sea cual sea tu caso, estás a punto de adentrarte en un mundo caótico, que al mismo tiempo es sin ley pero con reglas tácitas.

Tendrás un montón de oportunidades para divertirte y encontrar fortuna… Tantas como para salir escaldado, si no sabes navegar por estas aguas.

Abordemos juntos el tema y sus posibilidades.

Un webinar para despejar las dudas más habituales

Este es un webinar que realicé junto a mi pareja, Diana Garcés de Hablando de Sexo, para nuestro grupo Tribu Relaciones Auténticas.

Forma parte de un ciclo de cuatro webinars, junto a Tensión Sexual, Cibersexo y Fantasías.

Si en este momento no dispones de tiempo suficiente para verlo, resérvalo para más adelante y sigue leyendo. Encontrarás la respuesta a tus mayores curiosidades y dudas sobre la tensión sexual. ?

Primero lo primero: ¿por qué usar servicios de Online Dating?

Muchos de mis lectores (y lectoras, ojo, que las mujeres son el 60% largo de mi público) admiten que prefieren el cara a cara. Las citas y los contactos a la vieja usanza.

Una conversación frente a un café, en vez de frente a una pantalla. Una quedada para comer. Aventuras de las que acaban naciendo amistades.

Lo irónico en este asunto es que, actualmente, estamos tan metidos en nosotros mismos que a menudo ni siquiera somos capaces de hacer amigos como lo hacíamos cuando éramos niños.

• Anda, ¡a mí también me gusta Pokémon / Dragon Ball / Harry Potter!
• Cómo, ¿que tú también practicas natación / senderismo / Judo?
• ¡Hola! ¿Con qué equipo voy?
• ¡Qué chachi eres! ¿Puedo darte un beso?

Hemos crecido y le hemos añadido unas cuantas complicaciones extra a la cuestión.

Admitamos algo: las redes de online dating simplifican bastante el proceso de contactar con personas nuevas.

No todo el mundo tiene tiempo, interés, autoestima o fuerza de voluntad suficiente para socializar como se ha hecho de toda la vida: cara a cara, de tú a tú.

Cuando son a la cara los rechazos queman y desgastan; pero en internet es un simple juego de números.

A costa de unas cuantas horas (de aburrimiento, de tiempo muerto en el metro o entre clases, o mientras intentas hacer un pensamiento en el cuarto de baño) revisando perfiles, puedes toparte con personas de todo calado y calibre.

¿Por qué son tan interesantes a priori las redes de online dating?

Te permiten filtrar a las personas por ubicaciones e intereses. Y eso facilita la conexión inicial.

Puedes decir que sí o que no indiscriminadamente, con sólo deslizar el dedo. Sin exponerte al ridículo. Y eso mola.

Lo que no es tan divertido es lo que tiende a suceder en esa clase de sitios…

Puedes encontrarte con un carrusel de fotos de pollas a partir de ciertas horas, y a personas ciertamente insulsas, poco atractivas, sin oficio ni beneficio; que se creen reyes y reinas del mambo.

También se puede cruzar uno con auténticas maravillas de la raza humana: posibles nuevas amistades y parejas que son además gente de calité… Que es por lo que los sitios de online dating siguen teniendo futuro.

Y precisamente al hecho de aumentar nuestras probabilidades de lograr encuentros reales y duraderos con gente de bien es a lo que dedico este texto.

Segundo paso: escoger la red de online dating a utilizar y elaborar tu presencia allí

Una vez que ya tienes claro que te interesa y en qué te puede beneficiar el Online Dating, puedes pasar a construir lo que será tu base de operaciones. Para ello, aquí tienes unos cuantos factores a considerar por su importancia y frecuencia.

No todo es como lo ves en una red de online dating… ¡Ni en cualquier red social, ojo!

Recuerda: [piopialo]en internet las mujeres son hombres, los hombres son niños, y los niños son agentes de la secreta[/piopialo]. Es decir, que no te fíes de las apariencias. Un perfil falso es muy fácil de hacer, y la suplantación de identidad es (por desgracia) muy común. A veces indetectable, a no ser que por casualidades de la vida se trate de una persona fácil de ubicar en internet.

Hace años conocí a una chica por Tuenti (red social que hoy pasó a ser una operadora móvil, marca blanca de Movistar). Esta señorita, que se hacía llamar Daniela, me estaba mintiendo a la cara.

Sí, era una mujer y pude hablar con ella por teléfono más de una vez. Y probablemente fuese su nombre de verdad, no te digo que no; pero estaba suplantando la identidad de otra persona.

Lo descubrí gracias a otra amiga, que me avisó al ver las fotos en que ella me etiquetaba de que esta chica estaba robando fotos a una famosilla del metroflog mexicana.

Igual que tú sospechas, los demás sospechan de ti y de tus intenciones

También me ha sucedido que, en menos de dos días de contacto, una chica me envíe fotos suyas tras exigirme alguna prueba de mi identidad.

Por ejemplo, que nos viésemos por Skype. Para asegurarse de no haberlas enviado a un viejo verde (cita textual).

Dicho lo cual, estos son mis consejos.

No utilices las redes sociales tipo Facebook, Twitter, Tuenti, Instagram, etc. para ligar.

Si has hecho contacto con alguien y queréis comunicaros en intimidad, eso es otra historia. Y aun así tenéis otros medios disponibles para ello.

Si tienes que escoger redes actuales para ello, evita las de pago.

Tinder o Flirtie se prestan bastante bien a ello, son muy funcionales y tienen un diseño muy cuidado y atractivo. Además, los contactos que haces allí son casi siempre con personas reales.

Las redes de pago suelen enviarte mensajes falsos o tratar de conectarte con usuarios a la desesperada (gente que ni siquiera entra en tu baremo) para que sigas renovando la cuota.

Los sitios web como Badoo, «sexy o no», «vota mi cuerpo» y similares (en caso de que sigan funcionando) son escombreras.

Hay muchas personas que se meten por curiosidad y lo abandonan, pero también hay gente que se queda.

Lo más normal es que ahí triunfe la superficialidad, y de paso, los y las que venden su cuerpo al mejor postor.

No es complicado encontrar escorts y trabajadores/as sexuales en esos sitios, pero en mi opinión renta más conocer a otra clase de personas.

Dejo constancia de que no tengo nada en contra de quienes se dediquen a ello (y hasta tengo varias amigas escorts, strippers y prostitutas); pero considero que hay lugares más apropiados para hacer esa clase de contactos.

Una vez se tienen claras estas pautas para proceder en el online dating, se puede pasar a una cuestión igual de importante…

¡Ahora empieza la fiesta!

Toca decidir el uso que vas a hacer de la red y la clase de contactos que vas a intentar establecer…

Y en base a eso, toca elegir adecuadamente la red de online dating a la que quieres dedicar tus esfuerzos.

Porque, efectivamente, no es lo mismo…

• Apuntarte a una red como Meetup en busca de compartir tus aficiones y conocer a personas que ya sabes que están interesadas en ellas…
• Que inscribirte en Grindr, una red en la que ya sabes que la gente va a follar y con suerte rascas algo más de ahí.

A facilitar esa decisión y optimizar tu perfil para lo que te interesa lograr le dedicamos los próximos apartados.

Tercer paso: optimizar tu presentación y clarificar tu perfil

Suponiendo que hayas superado los procesos de decidirte a probar y escoger la red que mejor sirva a tus intereses, llegamos al punto donde tienes que jugar tus cartas y liarte a contactar con gente.

¿Y eso cómo se hace por aquí, por internet?

Muy sencillo.

Me centro en el caso de Tinder y plataformas semejantes para explicarlo.

En dichas plataformas se te pide que rellenes una serie de datos sobre ti: tu nombre, tu edad, tu localidad, un “sobre ti” y un “buscando”. Además, debes adjuntar una o varias fotografías.

Mi recomendación personal es que no sean explícitas. Es decir: evita los desnudos y quizás hasta las insinuaciones. Para todo lo demás, tu creatividad y tu identidad mandan.

Algunos de esos datos que te piden adjuntar puedes hacerlos privados, pero por ejemplo, siempre se mostrará una distancia aproximada respecto de los usuarios que veas o que vean tu perfil… Aunque no tengo claro en qué se basan para medirla.

Creo que probablemente usan la geolocalización para determinar desde dónde te conectas y muestran esa distancia entre ambos, aunque digas que eres de una localidad más alejada de lo que aparece.

Cumplir con esto aporta un primer baremo para ir discriminando perfiles… O para que discriminen el tuyo.

Pero eso es bueno, porque no se puede agradar a todo el mundo. ¡Y tampoco todo el mundo te va a poder agradar a ti!

Así que no te lo tomes como algo personal. Todos filtramos, lo cual termina siendo hasta necesario.

¿Y cómo lo hacemos en un sitio de online dating? Te pongo el ejemplo más básico:

Si te gusta viajar y te lo puedes permitir con suficiente frecuencia, te importará menos que si estás más restringido en ese aspecto. Aunque tampoco sabes si la otra persona es viajera, ¡así que tú decides!

Otro baremo a tener en cuenta es, por ejemplo, la última conexión de los usuarios.

No te interesa contactar con perfiles que muestren demasiado tiempo de inactividad, porque lo más probable es que ya ni siquiera usen la aplicación.

Algunas redes van incluso más allá y te indican una frecuencia de uso aproximada.

Y en las que no ofrecen esto de forma nativa, los propios usuarios se encargan de decirte «no miro esto muy a menudo, así que te pido paciencia».

Con ello te animan a contactar a un cierto perfil que te interese mucho aunque lo veas inactivo, al decirte que entra más o menos cada dos semanas, por ejemplo.

Y por supuesto, también cuenta lo que veas en sus fotografías y lo que leas en sus “sobre mi” y “buscando”.

Si te gusta lo que ves y lo que cuenta no hay motivos para no darle una oportunidad y pulsar donde el sí…

Pero también hay que ser honestos y realistas:

• Si una persona busca pareja y tú solamente quieres amistades o contactos esporádicos, no andes mareándola.
• Y viceversa, lo mismo: si quieres compromiso no jodas a quien solamente busca diversión.

Cuando alguien te parezca demasiado joven o demasiado mayor para ti, dale el beneficio de la duda si no pillas ninguna bandera roja importante para ti. Es mejor juzgar por su personalidad y su trato al intercambiar mensajes.

¿Y qué ocurre si tengo una experiencia desagradable con alguien?

Desde luego, si un match en una de estas redes de online dating hace algo molesto u ofensivo, puedes cortar el contacto y dejar de recibir sus mensajes inmediatamente.

Dos ventajas de las redes que uso como ejemplo son estas:

1. Que solamente tras declarar el interés mutuo os ponen en contacto (por tiempo limitado pero prorrogable); y
2. Tienes la capacidad de cortar la comunicación y no seguir recibiendo mensajes en cualquier momento.

Eso no te garantiza que los contactos que hagas te salgan a pedir de boca, sino solamente que puedes poner freno antes de que la cosa se desmadre.

Para que te salgan interacciones elegantes y se traduzcan en algo significativo en tu vida real, tenemos el próximo apartado.

Cuarto paso: reglas de urbanidad y cortesía en el online dating (y el de la vida real, ojo)

Ahora que ya te has metido de lleno en el ajo y estás empezando a enviar y recibir mensajes, estoy seguro de que quieres hacer que el tiempo que inviertes en ello te sirva para algo.

Es probable que hayas dado con personas muy prometedoras y candidatas a enriquecer tu vida sustancialmente.

Como no creo que quieras fastidiar eso, prueba lo siguiente:

Tienes que ir de frente y ser honesto, a toda costa.

Con eso no te digo que seas sincericida, ni mucho menos.

Te indico que tanto si lo que buscas es conocer gente nueva como compartir aficiones, tener sexo casual o alguna cita amistosa esporádica, es importante que lo digas.

Si también te interesa establecer una relación, sea del tipo que sea, hay que dejarlo claro desde el principio.

Esto es por no perder tu tiempo ni hacer perder a los demás el suyo… Pero, desde una perspectiva más bonita, es porque ser abiertos y honestos enriquece las relaciones.

Si una persona tiene esa clase de libertad para ser uno mismo y expresarse auténticamente contigo, es más probable que desee continuar en contacto.

Y también aumentan las posibilidades de que eso trascienda en algo más íntimo y profundo.

Prohibido engañar, manipular o enmascarar. ¡Así no impresionas más a nadie!

Al contrario: si recurres a esas tretas de persona incapaz, como decía Kierkegaard, será cuando espantes a los demás.

• Si tienes pareja, hijos, o alguna clase de compromiso importante… No lo escondas ni lo niegues.
• ¿Ha ocurrido algo brusco o dramático en tu vida? Trabájatelo, y como parte del trabajo, aprende a encuadrar esa parte de tu identidad en una narración sana y humana.

Es de justicia que le des a la otra persona la oportunidad de aceptarte y apreciarte tal y como eres tú, tal y como es tu vida. Lo mismo va por las enfermedades o condiciones especiales.

No se trata de ser cagalástimas, sino (incido) de darte a conocer y querer siendo simplemente tú.

Respeta ciertos horarios. ¡Cada persona tiene sus tiempos, ritmos y necesidades!

A no ser que se te indique lo contrario, las horas de alimentación, descanso y sueño son sagradas y de guardar.

El horario laboral es un buen baremo para eso: nada de escribir entre las 14 y las 17, ni a partir de las 21 horas.

Si te escriben a ti y te parece oportuno, responde… Pero no acostumbres a la gente a buscarte a horas intempestivas, o te verás teniendo que poner tu teléfono en modo avión.

¡Es molesto no respetar los horarios ajenos y que no respeten los tuyos!

De un tiempo a esta parte, todas las redes sociales, webs de contactos y opciones de online dating funcionan a través de apps.

Y si además, a esos contactos que has hecho te los pasaste a WhatsApp, Line, Viber o Telegram, o incluso a Facebook; las alertas constantes te joderán más de una noche.

¿Solución? Hay varias:

• Si tu terminal dispone de ello, activa el modo «No molestar» o «Concentración». Se desactivarán las notificaciones.
• Desconecta el internet de tu aparato, y no recibirás nada que no sean llamadas y SMS.
• O bien ponte el modo avión, y no te entrará nada. Avisa a tu familia y a quien te importe de que a esa hora no atiendes a nadie, y si fuera necesario, seguro que ya cuentan con un medio alternativo para ubicarte.

Únicamente haz invitaciones. Propón, y que la otra persona disponga.

Cuando quieras usar un medio de contacto más ágil o quedar en persona, no juegues a lo que juega todo el mundo.

No intentes hacer un enredo a la otra persona.

Evita ser pasivo-agresivo. Sé asertivamente proactivo.

Hazte cargo de tus deseos, exprésalos abiertamente y extiende una invitación.

¿Que no la aceptan? Ningún problema. Las invitaciones no tienen fecha de caducidad (a no ser que así lo decidas y manifiestes). Y si decidís mantener el contacto, se pueden aprovechar a posteriori.

No envíes lo que no te pidan.

Está muy bien que te guste el sexting y otras formas de interacción sexual cibernética, pero por simple respeto… Guárdate hasta que tengas claro y se haya explicitado verbalmente el deseo de ello.

Yo tengo una norma, basada en la reciprocidad: de menos a más, y siempre hasta donde llega la otra persona. Ni más, ni menos.

A veces me toca romper el hielo a mí. A veces me toca dar sin recibir lo mismo que doy… Pero suele recompensar con algo equivalente, o incluso con algo mejor: el encuentro en persona.

Si haces caso de todas estas advertencias y observaciones, tus posibilidades de éxito en el Online Dating aumentan exponencialmente.

Tienes la opción de crear nuevos círculos de amistades y refrescarlos constantemente, todo en base a tus intereses actuales y futuros.

Podrías también construir tu propio harén de contactos para haceros cositas a través de la pantalla; pero me jugaría mi huevo izquierdo (y probablemente no lo pierdo) a que quieres algo más tangible y carnal.

La manita y los juguetes están de puta madre, pero no sustituyen el sudor, los jadeos y el calor de pecho ajeno.

Y por eso, pensando en quienes queréis relaciones en la vida real, daré unas recomendaciones extra.

Quinto paso: qué hacer para salir de la pantalla y entrar en la cama

Vamos a asumir que has hecho caso de todo lo anterior y hay un buen clima entre la otra persona y tú.

Siendo fieles al espíritu de las invitaciones, con eso tienes más que suficiente para echar a rodar.

Si quieres algo más intenso e interesante, construye junto a la otra persona la invitación. Que sea seductora y llamativa para ambos. Que explore y alimente vuestras fantasías.

Y para ello, basta con preguntar y estar abierto a responder preguntas.

Si seguís cumpliendo con la apertura, la honestidad y la reciprocidad… Solamente puede salir bien.

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¡Ahora te toca hablar a ti!

¿Cuál ha sido tu experiencia usando redes de Online Dating? ¿Y usando las redes sociales “típicas” para ligar y hacer contactos? ¿Qué te seduce más en los perfiles que ves? ¿Qué hace que desees seguir en contacto, o quedar en persona?

¿Te atreves a compartir tu historia con nosotros y sumar tus vivencias al cajón desastre, a la bizarrería o al arco del triunfo?

Y por último, ¿qué añadirías a esta guía?

Contribuyamos a un mundo más bello…

Sergio