Tómatelo con calma gañan

(Artículo publicado originalmente en Foro Interacción Social antes de crear el blog)

Exacto, tómalo con calma.

Hablemos un poquito del estado de cada cual.

Hay días en los que te puedes comer el mundo de tres bocados, y hay días en los que el mundo te empacha. Independientemente del humor. Yo puedo estar del mejor humor del mundo a pesar de que se me haya muerto un familiar, pero eso no significa que me encuentre en mi mejor estado.

Algo que la gente confunde es el humor con el estado, y cada vez que lo veo me horrorizo, gente forzándose a hacer cosas cuando a lo mejor les conviene más esperar a que su estado interno (y hablo de estado en concepto «como me encuentro ahora», no confundamos ideas) corresponda a sus ánimos e intenciones…

Quieras que no, si tu juego es el de un tipo alegre, divertido y arrollador, algo va a dejar traslucir que tu no estás en esa onda si en efecto te ocurre algo. ¿O crees que eso no se nota? Somos seres empáticos, lo creas o no, te joda o no.

Y más aún, una mujer. Parecen expertas en leer los putos estados emocionales de cada cual. Yo soy un experto en ocultar mis sentimientos, pero los que me rodean han aprendido a ver cómo se manifiestan y creedme que es difícil pero no imposible que se note lo que ocurre detrás, lo que te come por dentro. Por eso, en vez de enmascararlo, lo mejor es ponerse en paz con uno mismo y después regresar a la normalidad.

Daos cuenta de algo. Antes de colgaros la etiqueta de «seductor» y decir que solo os interesa ligar, os diré que la vida no solo es ligar, y ligar no te va a dar de comer. Y si, mucha gente se sacará su pastita con el mundillo, pero dudo muy mucho que mantengan su calidad de vida exclusivamente de esos ingresos. Además, que yo sepa, a ti que lees esto no te pagan nada por seducir o enseñar a seducir, es más. Tú tienes tus propios asuntos, que merecen su tiempo de atención, tienes a tu familia, a tus amistades, a tus hobbys y aficiones (como dije en otro post mío, enriquece tu vida haciendo lo que te gusta), y en definitiva, tienes otras cosas más importantes que ligar.

El MAYOR ERROR es creer que ligar es un DEBER, una OBLIGACIÓN, cuando en realidad se trata de un COMPLEMENTO A TODO LO QUE HAGAS.

La obligación, desde mi punto de vista, es encontrar aquello que te divierte en cualquier situación, y en efecto acabar divirtiéndote en cualquier situación, independientemente de si ligas y teniendo el ligue como complemento.

Y esto lo considero como la mayor y mejor expresión de un Juego Interno bien estructurado, comodidad, diversión y soltura en cualquier cosa, en cualquier lugar, situación y compañía. Pero sin forzarte. Porque forzarte puede quebrarte.

Cada cual conocerá sus propios límites, algo no muy discutible porque no hay un término medio, pero lo generalmente mejor aquí seria dejarlo en el punto en que tengas que decir «mira cariño, no es mi mejor momento y mis ánimos no están en su mejor etapa, así pues te sugiero continuar con esta charla en otro momento en que no parezca un cadáver andante».

Ya habrá tiempo para pensar con la polla tío, ya habrá tiempo para enterrar la cara en su escote. (Y hacerle un buen BRRRRRRRRR en las mamellas, pero de eso no trata este post ;))

Pero si no estas en tu mejor momento hazme el favor y no te la juegues, porque si la cagas va a ser culpa de hacer las cosas cuando no tocaba, por forzarte.

En fin, que más que nada, antes de lanzarte a jugar por impulso, evalúa si es tu mejor momento, porque hay días que simplemente no apetece o no estamos bien como para ello… Y nuestro juego no rendirá igual.

Y eso lo saben los dioses, los maestros, los gurús y hasta el mas frusco del mundo.

Kheldar

Actualización Julio 2011: A estas alturas de mi vida, las opiniones vertidas en este artículo se mantienen pero con una notabilísima y marcada diferencia. Si no hay autenticidad, si no hay honestidad con uno mismo y con los demás, no hay seducción.

Ni hay vida, por cierto. Es el peor error de la industria del ligue, sustituir la vida y la realidad por sus teorías y «cosas raras porque sí»… Uno enorme, de hecho.