|

Lecciones del Orgasmo Masculino 3: Actitudes y Sexualidad

Relaciones-sexuales_articulo_landscapePara continuar con esta serie de escritos nos vamos a remitir a una de las partes más importantes de todo el asunto… Espero que nadie empiece a pensar que vamos a hablar del manido asunto ese de los «alfa», ni de cualquier otra historieta.

Esta cuestión es bastante diferente. Los tiros van por otro lado… Vamos a hablar de las más obvias (y por ello obviadas) actitudes que son capaces de favorecer tu vida sexual.

Bueno, si has seguido leyendo… Felicidades.

Sé lo que representa para cualquiera reconocer que necesita consejo sexual. Pero te diré algo: por mucho instinto que se tenga, nadie nace enseñado. Hay simplemente nociones «básicas», las más naturales y salvajes.

Se dice mucho que cuanto más inexperta la persona más pasión demuestra a modo de compensación por la falta de habilidades o recursos. Hay bastante razón en esto, pero…

¿No puede ser acaso que todavía esa pasión no se ha visto ahogada por las mencionadas habilidades y recursos? Ahora estamos hablando de lo que importa.

Las mejores artes amatorias no están en manuales.

Demasiadas personas intentan adquirir las técnicas, los trucos y los secretos para ser amantes ideales… En el aspecto físico del asunto. Todo, puramente artificial. Acariciar, lamer, besar, morder, masajear… Da igual si son los pechos o el sexo de la mujer que les acompaña, pero recaen meramente en esta superficialidad.

Sí, hay un tremendo placer en el aspecto más externo… Pero por si mismo y así de llanamente, para lo único que te vale es para una paja mal hecha.

Tenemos que hablar de algo importante: DEJA DE BUSCAR LAS RESPUESTAS DONDE NO ESTÁN. El secreto para ser el mejor amante posible se halla en el libro de tu vida… Es decir, en la historia que tú mismo escribas con tus actos y relaciones. Serás mejor amante conforme vayas aprendiendo a escuchar a la otra persona y acompasarte a ella.

Para ello, lo que más te ayudará será tener clara tu sexualidad y lo que te atrae. Con todo lujo de detalles: en qué modo, con qué potencia y frecuencia…

Yo tengo bien clara mi sexualidad. Y con ello, no me refiero solamente al hecho de saber que me gustan los hombres -algunos hombres, no todos-, y las mujeres -que potencialmente pueden llegar a gustarme todas-; sino que también estoy diciendo que tengo clara mi apetencia y mi disfrute del contacto sexual, no lo escondo ni lo oculto, pero tampoco hago alarde del mismo.

Puede decirse que, cuando alguien me provoca esa sensación, ese deseo… Mi actitud me impulsa a descubrir por qué estoy deseando acostarme con esa persona. ¡Sin esfuerzos!

Mi propio instinto me habla para decirme: «Oye, Sergio… A esa persona, puede valer la pena conocerla. Quién sabe si acabaréis en la cama, pero… ¿Te lo quieres perder, si pudiera ocurrir?» No es lo más habitual que la conciencia diría… Y por supuesto, de mí depende hacer caso de mis instintos, o ignorarlos, o tratar de controlarlos.

Ocurre que mi conciencia no ha sido moldeada por Disney, ni por toda la cultura pop, ni por la comedia romántica americana. No me caracterizo por esconderle a ninguna mujer lo que me inspira. Y eso, puede llevar -y en efecto lleva- a que puedan explorar cómo se sienten ellas mismas acerca de mi mismo y lo que me provocan.

Cuando sabes lo que hay, tienes la libertad de decidir conscientemente; y eso es lo que más valoramos.

Si ocurre tal situación, en la que te han dejado claro de manera sincera y respetuosa lo que sienten y lo que les inspiras; así como lo que querrían obtener de ti…

Lo que queda es una situación donde te están pasando el poder de pensar en lo que tú sientes, en lo que a ti te apetece: una ocasión para ver si hay confluencia. Ocasión que por lo general desemboca en que las personas tengan una relación más abierta.

Aunque eso no significa que por decirles las cosas a las claras, los demás vayan a entrar en tu cama y hacer que te corras cada vez que chasques los dedos.

Significa que modifica en cierta manera las condiciones en las que se da la relación, y la percepción que se tiene de la misma. Con esto, se entrega y se favorece una cierta base de confianza, complicidad, honestidad, descaro, picardía, deseo, misterio, sensualidad y pasión… Y por ello, os propongo un ejercicio práctico:

Identifica todas las cualidades que he mencionado en la sentencia anterior. Acótalas, define cómo se manifiestan en ese hecho. Hazme llegar tu respuesta vía comentarios o email; y estaré encantado de contestarte y apoyar -además de ampliar como pueda- tus propias percepciones.

Sembrando buena cosecha, se recogen buenos frutos.

No debería prometeros esto, pero siento que no debo callarlo. Si realizáis ese ejercicio práctico, estaréis un paso más cerca de ser los amantes que ELLAS desean a su lado y VOSOTROS querríais ser. Puede que varios pasos, incluso.

Y si os parece poca cosa, diré para apoyarlo algo que decía Benjamin Franklin:

«Incluso los viajes más largos se inician con un sólo paso«.

El siguiente paso al primero, será el de descubrir la inspiración y el placer a través de la observación; cuestionando nuestra propia percepción.

Pero no nos adelantemos. Primero… Hay que poder conocer y definir nuestras sensaciones y estímulos. Luego, viene descubrir la fuente de la que provienen (sea interna, externa o una mixtura de ambas).

Y al hacerlo, cuestionar los estímulos (tratando de afinar lo más posible con la motivación exacta) y profundizar en ellos (procurando ampliar el horizonte de la percepción interna y externa).

Pero eso lo dejaremos para posteriores artículos, que es viernes… Y éste ya se ha alargado.

Pasa un buen fin de semana… Y que tengas la ocasión perfecta para descubrir esto.

¡Salud y feliz vida sexual!


Si quieres mantenerte al tanto de mis avances, haz click en “Me Gusta” en la página de Facebook (tienes un acceso rápido en el lado derecho del blog). Así podrás:

  • Recibir actualizaciones sobre el libro, mi blog y otros contenidos.
  • Participar en concursos y otros eventos que organice.
  • Compartir tus intereses y crear relaciones con gente afín.

Para aumentar la calidad de tu Experiencia LVEF, puedes también:

  • Leer las entradas del blog para conocer y practicar la Alquimia Interior.
  • Invitar a tus amigos a esta plataforma para acompañarte en tu transformación.
  • Participar con tu opinión y sugerencias. ¿Cómo podemos ayudarte mejor?

Por favor, si te ha gustado esta entrada, considera:

  • Puntuarla – Para que pueda conocer cuánto te ha gustado.
  • Comentarla – Para que con tu opinión sigamos creando inteligencia colectiva.
  • Compartirla – Para que otras personas puedan beneficiarse y disfrutarla.
  • Recomendarnos – Para seguir creciendo y avanzando junto a ti y los tuyos.

Muchísimas gracias por tu atención, compañía y colaboración.

Un abrazo, y vuelve cuando quieras.

Kheldar

  • ¡Unete a la Familia LVEF! Haz click en “Me Gusta”, suscríbete y participa.

Publicaciones Similares

2 comentarios

  1. Buenas noches Segio, estoy encantado con lo que he leido, me encuentro en una situación de autorreflexión e indagando en mi ser respecto a la sexualidad y otros aspectos se refieren. El hecho esque siempre he sufrido problemas con la eyaculación, tras muchos años, he aprendido a sobrellevarlo e intentar calmarlo. Hasta ahora no había conocido nada de esto y estoy muy involucrado con ello, me leí el hombre multiorgásmico y estoy realizando los ejercicios día tras día aunque muchos no sé cómo se deben hacer y cada cuanto tiempo etc etc… estoy haciendo pranayamas diarios y chi kung varias veces a la semana, así como sesiones de masturbación evitando la eyaculación y ejercicios de kegel. Aún así, me gustaría conocer tu «rutina» para haber llegado a ese punto, pues me gustaría eliminar de una vez por todas este problemilla que no me deja disfrutar plenamente del sexo. Muchísimas gracias, un abrazo!

    1. Saludos, Vicente, y bienvenido a La Vida es Fluir.

      Paso a responderte. Mi rutina es sencilla de explicar y quizás complicada de conseguir. Yo apago la mayoría de mi mente y me olvido del pasado, de otras relaciones y otras personas (e incluso de otros eventos con la misma persona que esté) y me sumerjo en el momento actual. El propio cuerpo te ayuda si estás disfrutando a mantenerte ahí. Puede que eyacules súper rápido o que te cueste siglos, pero te da igual porque tu cuerpo responde a la situación que tiene delante.

      Yo en ese sentido no hago nada como pranayamas ni ejercicios de Kegel. Y de hecho te digo que siento que cuanto más me toco a mi aire, sin obligarme a eyacular o impedirme hacerlo, mejor conozco y controlo mi sensibilidad.

      Por cierto: de lo dicho, quédate con el tema de la mentalidad y de la sensibilidad. Son las claves. Si te centras en esos puntos verás cambios radicales.

      Si esto te ayuda, que espero que sí, me alegraría mucho que me lo cuentes. Un abrazo para ti también.

Responder a Vicente Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *