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Hora de cambiar las perspectivas

Tras leer el artículo «¿Tiene la seducción los días contados en España?» en Seducción y Superación de David del Bass, me decidí a hacer un punto de inflexión/reflexión para todo el mundo, visible a todo aquel que desee conocerlo.

Este mismo punto está colocado como comentario en la entrada pertinente que originó la motivación para escribir estas palabras, pero ahí no estaba lo bastante a la vista.

Es por esto, que os enlazo a dicha entrada y espero que regreséis a leer la reflexión, o la busquéis entre los comentarios: «¿Tiene la seducción los días contados en España?«

Muy bien, ahora que habéis regresado… Este es el comentario que le hice:

Yo solo me voy a limitar a decir que la seducción es una de tantas habilidades sociales, y que no se puede pretender entrenar esta sin tener entrenadas todas las demás o gran parte de ellas (al menos las más relacionadas, como es la comunicación eficiente o la inteligencia emocional por ejemplo). Porque se va a cojear mucho, y se va a tardar mucho tiempo mientras se trata de poner a tono un montón de cosas desde la perspectiva de una sola de ellas.

En España tenemos la desgracia de que ha surgido el boom de la “seducción de libro/científica” plagada de métodos lineales que prometen el oro y el moro y te dan una especie de forma mascada de hacer las cosas.

El problema aquí es que eso no fomenta la inspiración propia, ni la improvisación, ni la autogestión, ni nada en esa onda. Te hace depender siempre de lo que otro cree que es correcto para que tú y cualquier otro pueda atraer a otra persona.

Por eso, mi forma de hacer las cosas es la del Maestro, la figura nombrada en el Tao te Ching. En vez de imponerte sus ideas, te las muestra y deja que tú mismo les encuentres el sentido. Te aconseja, te puede guiar, pero deja que tú tomes el camino. Y te acompaña si lo deseas, pero no te fuerza a recorrerlo ni te dice por dónde.

Por eso también, mis quehaceres son entrenamientos en habilidades sociales directamente desde el inicio, fomentando las competencias de autoconocimiento, motivación propia, comunicación eficiente, inteligencia emocional y liderazgo como fuentes principales para la excelencia personal.

Y de hecho… Así es como aunque no sea tan conocido como la mayoría de “los grandes” en estos temas, he podido lograr resultados reales a corto plazo, demostrables y sobretodo NATURALES. Y debido a que esos cambios toman lugar en el espacio de un mes, mis ofertas duran exactamente eso, un mes efectivo de trabajo común.

Puede que sea algo más esforzado que un fin de semana de taller y salida, pero brinda resultados palpables y visibles desde el primer momento, que se mantienen y se afianzan conforme se va continuando en el empeño. Y a mi con eso, me basta.

Los antiguos Maestros eran profundos y sutiles.
Su sabiduría era insondable.
No hay forma de describirla;
lo único que podemos describir es su apariencia.

Eran cautelosos
como quien cruza un arroyo helado;
alertas, como un guerrero en territorio enemigo;
atentos, como un huésped;
fluidos, como el hielo derritiéndose;
modelables, como un leño.
Receptivos, como un valle.
Claros, como un vaso de agua.

¿Tienes paciencia de aguardar
a que tu fango se decante y el agua sea clara?
¿Puedes permanecer inmóvil
hasta que la acción justa aflore por sí misma?

El Maestro no aspira a la plenitud.
Sin aspirar, sin expectativas,
está presente y a todo da la bienvenida.

Desde aqui, quiero agradecer a todos aquellos que han confiado en mi y en mis consejos para ayudarse a lograr el cambio que buscaban.

Teaching, teaches me.

Kheldar

Nota: El aforismo nº 15 del Tao te Ching es un regalo personal que os hago. No estaba incluido en mi comentario al escrito catalizador, pero al volver a leer por enésima vez todos los aforismos… Encontré que se amoldaba a la llamada a la cordura que pretendía hacer con este escrito… O lo que yo mismo he escrito entra dentro de su molde.

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Un comentario

  1. Hago llegar un Francis Seal of Quality al artículo. Fantastico Kheldar. Cada vez resulta mas claro. Saludos Sergio !

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