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Cómo seducir y conservar a una mujer, por Aura Yurak

Hoy tenemos un pequeño regalito de Aura desde su blog Reflejos del Presente. Desde luego que esta chica no deja de sorprender… Es increíblemente polifacética.

Suelo escribir artículos destinados a las mujeres, básicamente porque acostumbran a ser las que me leen y me preguntan más, pero eso no es motivo para no escribir para vosotros, los hombres.

¿Qué quieren las mujeres? ¿Por qué dicen una cosa cuando en realidad quieren decir otra? ¿Por qué son tan susceptibles?

Los hombres a menudo os hacéis estas preguntas, entre otras más. Nos llamáis raras y creéis que nuestra natural bipolaridad no existe por otra razón que para incordiar.

Bromas a parte, aunque posiblemente habrá alguno de vosotros que alguna vez en medio de un ataque de nervios habrá llegado a pensarlo (o sin ataque), la realidad es que a pesar del carácter cambiante que suele caracterizar a la mujer, no es tan rara o difícil de comprender como siempre se ha creído. Es más, no se trata tanto de que un sexo sea el malo y el otro el bueno,  que uno sea el raro y el otro el cuerdo. Cuando se trata de defendernos, siempre señalamos con facilidad al otro, sin importar que sea hombre o mujer. Es muy fácil criticar cuando no se entienden las cosas…

La única realidad, es que hombres y mujeres no somos tan diferentes como parece. Al final, todos deseamos lo mismo, la diferencia de unos y otros reside en las maneras, en las actitudes. Los hombres también deseáis felicidad. Vosotros esperáis tanto como nosotras poderos sentir queridos, deseados y amados. Sólo que os lo tomáis con más calma… y no exteriorizáis tanto las ganas. ¿Verdad? ;)

¿Qué esperan las mujeres de sus enamorados?

Las mujeres sólo desean una cosa: sentirse especiales. Si los hombres logran hacer que las mujeres se sientan especiales a su lado, apreciadas y queridas, éstos van a descubrir lo fácil que es en realidad contentarlas.

Ellas no quieren palabras de amor si éstas no van acompañadas de actos, al igual que no quieren actos si no van acompañados de entusiasmo y sinceridad. Porque entonces va a parecer que estos hechos son sólo para cumplir.

Y muchos se preguntarán, entonces ¿por qué si quieren actos, muchas mujeres se dejan embaucar por farsantes que sólo les alegran los oídos a base de palabras bonitas y promesas que nunca cumplen? Pues porque las mujeres, por suerte o por desgracia solemos expresar los sentimientos mediante el lenguaje verbal. Siempre son necesarios los actos, pero de entrada solemos asimilar mejor las palabras. Lo que ocurre es que el lenguaje verbal tiene un poder casi anestesiante que hace que muchas pierdan la razón antes de poder diferenciar la verdad de la mentira. Lo malo llega cuando los hechos no aparecen…

¿Cómo se nos seduce?

Como somos comunicativas por naturaleza, es relativamente fácil que un hombre que habla con actitud no sea indiferente a nuestros ojos. ¿O debería decir a nuestros oídos? Obviamente las palabras por si solas no hacen nada. Una mujer que cae rendida a los pies de un hombre que sólo la piropea de forma inexpresiva y mecánica demuestra tener poca autoestima o mucha necesidad de afecto. Las palabras funcionan cuando se acompañan con la actitud adecuada.

El tema ocuparía otro artículo, pero puedo deciros que…

Una actitud adecuada es la que se emplea para llamar la atención de la mujer de una forma natural. Podríamos decir que una actitud que muestre seguridad es la más adecuada. Si un hombre es directo, decidido, amable, sincero y simpático, es difícil que no cause una buena impresión a la mujer. Si nos vamos al extremo veremos que estas actitudes se suelen emplear por separado y además de una forma inadecuada.

Muchos hombres cometen el error de cambiar el ser directo por la invasión del espacio, el ser decidido por entrometido, el ser amable por parecer demasiado sumiso, el ser sincero por descarado y la simpatía por las payasadas. Aunque parezca exagerado, se da con más frecuencia de lo que parece. Quizás por inseguridad. Al final lo que se requiere principalmente que es la seguridad, acaba convirtiéndose en todo lo contrario. Eso también puede ocurrir por una excesiva auto confianza. En este caso, cuando un hombre se cree muy seguro, no acostumbra a ver y reconocer sus fallos o aceptar críticas de otros. Y así va de fracaso en fracaso sin remedio.

¿Cómo conservar a tu chica?

Si tienes pareja y las cosas no terminan de funcionar, debes saber que las mujeres principalmete deseamos sentirnos especiales, y eso no os convierte en calzonazos (bueno, a algunos seguro) sino en hombres sinceros y responsables.

Algunas de las cosas que puedes hacer para mejorar tu relación son:

  • Escuchar. Y eso no significa quedarte mudo todo el tiempo o darle la razón a todo lo que diga. Escuchar es dejar que hable y luego, hablar tú. No des soluciones; compréndela. Con eso será suficiente. Las mujeres no queremos soluciones, sólo saber que tenemos alguien con quien contar, desahogarnos, compartir penas y alegrías, etc.
  • Atender. Las mujeres, igual que los hombres, queremos sentirnos atendidas. Si nos atienden es porque importamos. Así lo percibimos. Preocúpate de ella, pregúntale sobre su trabajo, sobre sus rompecabezas, sobre su menstruación… cualquier cosa es válida. Lo que importa es que ella vea que te preocupas, que estás al quite.
  • Cuidar. Cuida la relación. No es necesario que la hagas sentir como una princesita en apuros. Simplemente debes poner empeño en ser detallista. No hace falta que lo seas todos los días, pero no vendrá mal un detallito de vez en cuando. No tiene que ser algo ostentoso. Las mujeres no apreciamos los regalos caros como los más amorosos (al menos las que no somos materialistas). A veces una llamada al descanso del trabajo, un mensajito con un simple ”te echo de menos” o ”tengo ganas de verte”, un beso al despertar… pueden ser los mejores detalles para que una relación vaya viento en popa.
  • Colaborar. No ayudar. Debes colaborar con ella en los queaceres diarios. No es justo, por poner un ejemplo, que ella se encargue de llevar la casa y tú quedes como ”ayudante” o lo que es peor, le pongas la típica excusa de que a ella se le da mejor. Debes trabajar con ella, a su lado.
  • Hacerse valer. Si tienes autoestima ella te valorará. ¿A quién pretendes seducir siendo un pagafantas? Las mujeres atendidas en exceso, también se llegan a cansar y además un hombre que se comporta así en el peor de los casos, puede hasta lograr que ella se fije en otro más ”independiente”. A una planta se la debe cuidar cariñosamente, regándola de vez en cuando, en cantidades justas para que no muera de sed, si la riegas en exceso la matas.
  • Espacio. Dále su espacio. Al igual que tú quieres el tuyo ella también precisa el suyo. No seas celoso, si está contigo es por algo. Nadie es imprescindible para nadie, y cuando comprendas eso, que sois seres independientes que se complementan para dar lo mejor de si, te sentirás más libre y dejarás que ella también lo sea.

¿Ves qué fácil? Sólo con esos pasos puedes lograr grandes cantidades de cariño por parte de ella, y no sólo eso. Dejará de martirizarte e incordiarte. Ya no sentirás presión ni te hará preguntas retorcidas. Tu niña ya no será un incordio porque sabrá que la quieres y que la quieres bien.

Ahora toca practicar. Ya me contarás. ;)

Y esto es todo señoras y señores. Un consejito para ellas: FACILITADLE LAS COSAS AL POBRE CHICO, que hasta la fecha que yo sepa no somos adivinos ni lectores de mentes. Uno para todos sería no dar por hecho que el otro sabe o debería saber lo que quieres decirle o lo que te pasa por la mente… Pensando en el aspecto de una relación en marcha.

Y nada personillas, me voy a finiquitar lo que le debo al día antes de celebrar mi cumpleaños como mejor se me antoje. Tomad algo a mi salud esta tarde/noche 😉

Abrazos!

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8 comentarios

  1. Y realmente no te hace falta más, a cuantos tios habré visto haciendo el capullo con lo facil que habria sido una simple rosa en el momento oportuno. Sin embargo muchas veces he observado falta de feedback por parte de ellas a pesar de saber a ciencia cierta que estaban locas por el susodicho elemento. Siempre lo he achacado a su inseguridad.
    Aunque suene triste este es un tema que me apasiona, por la cantidad de buenas relaciones que he visto irse al traste antes siquiera de despegar bien porque el tío estaba haciendo el mongo o la tia no respondia a nada de nada.

  2. Aura…Aura… :-))

    Sobrio lo que dices respecto a lo que ESPERAN ustedes de nosotros y, sobre los elementos de la ACTITUD correcta para seducirlas… ;o)

  3. Me ha gustado mucho tu articulo.

    A la hora de hablar con una desconocida, aconsejas ir con seguridad, naturalidad etc, pero en una discoteca/ bar/ calle, que son lugares tipicos para interaccionar, no crees q es casi mas importante una buena frase/conversacion, para «engancharla»?

    saludos

    1. Antes de que Aura responda… Te diré un detalle yo mismo.

      De los tres lugares que señalas, cuéntame todas las ocasiones que conozcas en las que se puede dar sin problemas una buena conversación de verdad. Si te paras a pensar en el ajetreo, el bullicio, el ruido, las prisas, el tener que hacer algo… Enganchar conversando en situaciones así, es una odisea casi.

      Muchos dicen que si logras que te preste atención un rato de esta manera es un gran logro: no los vamos a desmerecer. Pero la verdad es que hay logros mejores… Como por ejemplo, lograr que se interese por tí sin llegar a decir nada o no decir gran cosa realmente y quiera conocerte fuera de todo esto, en una situación más tranquila y más personal. Ahí es donde la importancia de una buena conversación se nota más. Las frases en sí… Si no se sienten, si no tienen contenido emocional, si no son auténticas…

      Son simples artificios, son vacías. Incluso te iría mejor sin ellas porque te quitas de incomodar a la otra persona. A veces incluso cuando sientes lo que dices incomodas, así que imagina si no lo sientes o parece algo recurrente y que dices sólo por decirlo o porque queda bonito.

      Un saludo, y voy a avisar a Aura para que se pase a responder.

  4. Arlequin:

    Tienes razón, es una verdadera lástima que el orgullo de las personas acabe con una relación. Así se demuestra que todavía el ego va por delante de todo, y es lo único que importa. Obviamente hablo del orgullo malo, no el de la dignidad.

    Las mujeres nos callamos, refunfuñamos, nos ponemos de mala leche… por razones hormonales (y me molesta bastante que encasillen nuestro mal estar en eso, francamente), pero también razones sencillas que no queremos confesaros porque pensamos que debéis verlo vosotros mismos. Pensamos que si os decimos, »estoy enfadada porque ayer ni me miraste cuando me puse el vestido nuevo, últimamente siento que no me miras como antes y ni me tocas, y eso hace que me sienta más fea o que tienes a otra, etc» nos sentiremos doblemente mal, puesto que no sólo nos sentimos rechazadas, molestadas, etc… sino que encima percibimos una especie de RECHAZO. No hay nada que duela más que tener a nuestro lado una persona que se supone que nos ama, y sin embargo nos ignora… La indiferencia hace mucho daño, más que ciertas palabras mal sonantes o las discusiones. Al menos de esta manera tratas el tema, aunque acabes mal. Siendo indiferente no tratas NADA, y eso es lo que más nos molesta. De igual modo, por eso tenemos esa mala costumbre que deciros una cosa cuando queremos que entendáis otra. Sólo estamos evaluando si estáis o no al quite. Si os molesta, intentad prestaros atención antes de que nosotras vengamos con trucos absurdos que no sirven para más que agobiarnos.

    Aun así, todos los extremos son malos, y no digo que toda la culpa sea vuestra. A nosotras nos molestan ciertas actitudes con facilidad, así como vosotros en seguida tendéis a poneros a la defensiva cuando preguntamos u os decimos algo cuando realmente queremos deciros otra cosa… 🙂 Comprender al otro, ponerse en su piel, ese es el único truco que funciona para que las cosas no te molesten tanto.

    Sergi:

    Más me vale, jeje. Gracias por tu comentario. 😉

    Jethro:

    Depende ;). Hay veces que si… pero, ¿sabes que ocurre? cuando un hombre suelta una frasecita interesante, simpática o incluso… impertinente, pero de buen rollo, para llamar la atención de su »víctima» (siempre y cuando estemos hablando de una desconocida) siendo realistas y descartando que pudiera picar (pocas veces, quizás cuando esté borracha o tenga ganas de ligar para sentirse bien con ella misma y delante de sus amigas y poquíiiiiisimas veces porque sólo tenga ganas de conocer a alguien) pueden pasar dos cosas:

    – Que te haga caso un rato… y luego se olvide.
    – Que ni siquiera te haga caso o lo peor, que se cabree.

    ¿Por qué ocurre eso? Porque cuando utilizas tu ingenio para sorprender a una chica, mediante una frase, ella interpreta lo siguiente: »este me quiere llevar al catre y luego se olvidará de mi».

    Ella tiene que estar muy receptiva, tu no pasarte con lo que dices y estar en el contexto adecuado. Por ejemplo, no puedes acercarte a una desconocida en una discoteca y soltarle una frase para llamarle la atención y pensar que será mucho mejor eso que no decirle un simple »hola, ¿qué tal?» (te aseguro que ligarías más así que de la otra forma ;)) Es muy difícil tener éxito, a no ser que sepas cómo hacerlo, qué tono de voz utilizar, tener seguridad y no sólo eso, tienes que parecer natural…. la mayoría de veces se nota que el tío lo ha planeado, y no es espontáneo. Este es un tema interesante del que quiero hablar en un artículo. Tiempo al tiempo. He puesto de ejemplo la discoteca/bar porque es lo más común… pero ligar en la calle me parece genial, cualquier sitio puede ser válido y perfectamente exitoso. Pero es lo que dice Kheldar, las prisas, la costumbre de pensar que alguien que te habla sin conocerte quiere algo de ti, y si es a la luz del día quizás tu bolso… todo eso te impide actuar con naturalidad, porque tu subconsciente lo sabe, y te hace sobreactuar, aunque tu no te des cuenta.

    Kheldar:

    Nada más que añadir, estoy de acuerdo con lo que dices… Lo falso se nota, y a veces, por más entusiasmo que le pongas a una frase… es tan típico el querer sorprender a alguien así, que lo rechazamos casi automáticamente sin darle una oportunidad. Una pena también, porque hay chicos que valen mucho la pena y simplemente no saben cómo hacerlo… es normal. Yo no descartaría a un chico que me soltara una frase para querer conocerme… a no ser que estuviera borracho, muy salido, poco cuerdo, etc…

    Gracias chicos por comentar, ¡besitos!

  5. muy buen articulo aura! me ha gustado mucho tus valiosos aportes,del tema que estaria bien que escribieras un articulo(dijiste que podrias escribir otro articulo entero xD)es sobre esto:

    Una actitud adecuada es la que se emplea para llamar la atención de la mujer de una forma natural

  6. Saludos !!!

    Aura, dices: » […]pero ligar en la calle me parece genial».

    Ya que parece que sabes de lo que hablas o sos entendida en el tema, a ver si también te jalas otro buen artículo sobre «juego en la calle», «juego de día», …todo eso teñido de NATURALIDAD… ;-)…

  7. gran_aven y Sergi:

    ¡Tiempo al tiempo! jaja. Ciertamente no escribo cada día como lo hace Kheldar. Lo admiro, no sé de dónde saca el tiempo.

    Paciencia chicos. Y gracias por comentar. 🙂

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